Apariencias

El mundo esconde demasiados secretos. Tu, eres preso una vez más de algo que te mata por dentro, y mi forma de actuar vuelve a jugarme un nuevo nivel. Pero perdonad que me equivoque en lo que me tenga que equivocar, vosotros, los cobardes, no sabeis estamparos con una pared y saber sacar alguna buena conclusión de todo, y no he llegado hasta aqui para averiguar si teneis razón. Soy un alma demasiado danzante como para mantenerme cerca de la rutina, mi vida viene y va, mi felicidad depende de ello, no dependo de nada y tan solo las personas que realmente me importan y me conocen sabe que soy lo suficientemente cabezota como para luchar hasta cualquier punto, y si algo no merece la pena ahora, después la merecerá menos. Alimentaros con la vista, jamás será vuestro, yo luché por ello y jamás dejaré que nada le afecte. Venid, es una trampa demasiado apetitosa como para negarsela a alguien como yo, pero picais como chinches apunto de explotar. Me siento tan enferma que parezco esquizofrénica, no sé si mi odio hacia el ser humano murió o es que encontré a alguien tan perfecto que me hizo olvidarlo. No os temo, ahora soy gaviota, ahora soy quien he querido ser hace mucho, mucho tiempo atrás, antes de que ninguno de vosotros existierais para mi. Soy libre, libre de mis propias ataduras que poco a poco fui rompiendo gracias a personas y gracias a mi y mis errores.
Esconderos debajo de las piedras, se os nota, sois unos débiles, afrontais mal las cosas y a escondida llorais todas esas cosas que en el fondo sentís.

Uh, me contradigo, que forma tan bonita de hacerlo todo tan irónico ¿verdad?