Hoy recordé lo que añoraba los días improvisados sin importar cualquier cosa que te absorba de cada momento perfecto, hoy soñé uno de esos días de siempre pero únicos, como el simple andar por cualquier lado y sentir el abrazo, el beso o el cruce de miradas en cada segundo pausado, tocar el infinito aprovechando cada molécula de oxígeno y sin perder ni un minuto más, olvidarlo todo, incluso de que tu has llegado a existir.
Lo peligroso que son los recuerdos cuando se tratan de sentimientos, y lo fáciles que son de borrar todos los malos con tan solo un segundo bueno...
No se trata de la persona, si no de lo que ellas consiguen que recuerdes.
Me follaría cada palabra, cada lágrima y cada sufrimiento y lucharía porque todo esto no quede en esperanzas de todo lo que siempre quise tener, pero tan solo el tiempo me concederá aquel milagro que el karma me debe por todo este tiempo marchitado, desgastado y vomitado que tuve que aguantar mientras olvidaba que todo es posible y que yo soy la que elijo mi camino, solo YO.
Mis días están a salvo de todo siempre y cuando roce lo que hoy rocé.
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