Comprendí que cada persona pone sus límites en donde ellos crean, unos fracasan por su inseguridad, otros triunfa por saber que no existe límites, no exite barreras para nadie. Parte desde cero, somos todos como gotas de agua que salpican a las demás cuando una cae. Y alfinal siempre me acabo sorprendiendo de lo poco que te puedes fiar de las apariencias cuando sabes que apostarías todas tus cartas a que nadie es quien dice ser, y solo cuando hablas a solas, en la oscuridad de la noche con otra calada más de este veneno que nos consume es cuando sabes que hasta los duros guardan un cachito de dulzura en su interior. Supongo que por eso me intereso por las personas que se ocultan, que detrás de todo "su mundo" se oculta un montón de escombros, un pasado oscuro o un problema sin solución, uno de esos que te persiguen de por vida.
Mientras prefiero hacerles ver que la vida siempre tienes sus partes buenas y sus partes malas, es un huracán de sensaciones que se improvisa mientras organizas un futuro lejano, que incluso los malos momentos tienen buenas conclusiones y eso es lo que yo realmente me llevo. Todas y cada una de las personas que he conocido me han aportado algo, aunque sea un granito de arroz.
Sin embargo aún hay muchos cabos que espero poder atar algún día, y espero ese momento, porque sé que llegará.
1 comentario:
Pues si, a menudo las personas no son lo que parecen, o hay mas o es distinto. Todo el mundo puede sorprenderte.
Un saludo!
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