Lejos de tu hogar

Recuerdos que hicieron de mi infancia y mi adolescencia el más dulce sabor a melancolía, solía caminar por aquellas calles llenas de vida, llenas de experiencias vividas y aún así, uno nunca se para a pensar que estando tan lejos de tu hogar, llegases a recordar lo feliz que te hacían esos rincones tan mágicos de algún lugar perdido... Suelo encontrarme en los sitios más ocultos, allá donde muchos humanos olvidaron que existían por la sobrepoblación en las ciudades, me gusta sentirme libre rodeada de todo cuanto podría imaginar.
Aún siento el temblor del suelo, la brisa fresca al amanecer, las caras conocidas o un simple paisaje perdido, donde nadie me encuentre, donde nadie sepa que estamos allí, ni como encontrarnos, mientras otros solo quieren hacerse ver entre la multitud de las masas, yo me pierdo entre mis paisajes, las fotografías y mis conocidos.
Suena la música entre el silencio de la naturaleza, puedo sentirme viva, puedo creer que despisté a los más astutos. Es algo más de lo que muchos piensan, y lo cierto es que aún siento ese aroma a libertad en el que nadie es consciente de que nada es eterno.