El camino

 El camino solo puede serlo cuando empiezas a ponerle rumbo. Cuando encuentras el recorrido adecuado a tu lugar de destino. Aquel que marca la brújula de tu corazón y te guía hasta por los caminos más insospechados.... A veces es normal sentirse perdido entre tanto obstáculo, damos tantas vueltas que perdemos el sentido hasta olvidarnos de quien fuimos o qué andábamos buscando en todo este lío....

Pero de pronto entre tanta maleza te das cuenta de que se dibuja un pequeño camino difícil de apreciar, uno de esos que tomas por inercia, sin pensar, solamente por la curiosidad de saber a que rincón secreto te llevará. Lo cierto es que toparse con imprevistos forma parte de la aventura. Como si eso te hiciese entretenerte en tu camino y te ayudase a aprender de ello mientras te diriges a donde realmente quieres ir.

Las personas son parte del camino, son pequeños maestros que te hacen reflexionar sobre ti mismo. Son como señales puesta adrede que tratan de enseñarte más allá de tu zona de confort. ¿Acaso nunca has sentido que el mundo te intentaba decir algo con alguna extraña casualidad?

Las energías son como imanes en los que dependiendo de que tipo de vibración tenga tiene más probabilidad de conectar con ciertas cosas que tengan la misma vibración. Quizás es magia en cierto punto, el simple hecho de que veas en otros cosas que antes nunca te paraste a pensar.A veces me gusta pensar que la vida me pone a las personas indicadas justo en el momento que siempre lo he necesitado. Como si algo estuviera esperando el momento indicado para que nuestros caminos se crucen.

Alomejor solamente son imaginaciones mías pero en cierto modo creo que todo está conectado de algún modo, como si cualquier suceso por muy diferente que sea estuviese relacionado con algo que hice mal en el pasado, con las personas que me he relacionado a lo largo de mi vida o incluso que esté conectado con un futuro que aún desconozco fuera de aquí.

No sé exactamente hasta que punto he de caminar y si en algún momento cambiaré mi rumbo, pero sé que todo pasa y todo llega por alguna extraña razón que se escapa a nuestro entendimiento, sintiendo que hay un delgado hilo que nos une con el universo haciendo que todo y todos estemos conectados entre sí.