Quizás

 Invento mundos paralelos para huir de aquí, de todo cuanto el hombre inventó para enjaular nuestro verdadero potencial. Viviendo presos de nuestros propios pensamientos, de nuestras propias vidas queriendo alzar el vuelo constantemente viéndolo desde nuestra pequeña ventana al exterior.

Nos arraigamos y apegamos a las cosas materiales, a la vida, a los sentimientos, a las personas, pensando que no habrá nada más que lo que hemos conseguido amar. Odiamos, olvidamos y sufrimos con tal de no ver lo que está dentro de nosotros mismos. De ver como tropezamos en la misma piedra una y otra vez sin descanso, como si al equivocarnos nos diese igual ver el error que cometimos, llenamos vacíos con miedos que cada vez terminan haciendo la corteza más dura hasta quebrar y vivir vacíos, sin miedos, sin sentimientos, sin esperanzas... Creando en nosotros mismos una burbuja impenetrable que se retroalimenta con el ego... Un ego que cada vez es más fuerte y que te impide ver aquellas grandes cosas de la vida que no dejastes pasar por culpa de estar mirándote al espejo sin ver lo que te rodea más allá de ti, de tu verdad, de tu vida o tu pasado.

Somos esclavos de nuestros recuerdos y solo quien aprende a vivir con ello es capaz de cerrar esa puerta...Algunas veces la vida viene en forma de señales que se interponen a ti hasta que son imposibles de esquivar, imposibles de obviar para poder continuar por el camino que quisiste.

Quizás esas señales solo tratan de advertirte de que tengas cuidado con el bache y hasta que no le hagas caso seguirás dando vueltas en círculo pensando que avanzas y solamente sigues un camino establecido por inercia....