Páginas

8.3.24

A tí.

A tí que has construido tanto después de tantas guerras internas, a tí que eres imposible de domar, caballo salvaje que no quiere regresar. ¿Por que sigues poniéndole nombre a la libertad? si eres capaz de saltar cualquier valla sin miedo a rehusar. Tu que te guías por las señales de esta vida, esas que te guiaron hacia donde ahora estás, libre de cazadores y alimañas ¿Por que sigues omitiendo tu instinto si él fue quien te sacó de ahí? ¿Por qué sigues corriendo en círculos pudiendo huir lejos de aquí?

Tu bonito corazón conoce el odio que todo lo destruyó y ahora solo quieres dar lo que eres, que ya no seguirás este río de sangre que mato su sed pero no la tuya, que tu eres de agua salada y formas parte de algo mucho más profundo, algo que no transcurre ni del odio ni del rencor y que ahora sabes reconocer. No tengas miedo a chocar contra el suelo ni de volver a empezar de cero. Como el ave fénix resurge de todo aquello que te destruyó.


No hay comentarios: